has, haz

Una de las confusiones más habituales para hablantes del español de América es la diferencia entre “has”. “haz” y “as”. La “s” y la “z” suenan igual. La “z” tiene esa connotación de estilismo al lado de la vulgar “s” que tendemos a menospreciar como ordinaria y común.

“Has” es la conjugación de segunda persona del verbo “haber” que sirve para hacer el presente perfecto. ¿Alguna vez has comido carne cruda? Sí, varias veces he comido carne cruda. Me gusta el jamón. ¿Cuántas veces te has accidentado en bicicleta? Te has pasado con eso. No has hecho nada de lo que te pedí. Has molestado todo el día, ya cálmate.

En el pasado “has” se escribía “as”, sin hache, porque esa hache nunca ha sonado. Si acaso alguna vez sonó en el latín, pero durante toda la edad media y colonia nunca sonó en esa palabra. Lo que pasa es que en el intento por estandarizar el idioma en el siglo XVIII se retomaron algunas grafías del latín, y se reintrodujo la “h”. 

“Haz” con “z” es el imperativo informal afirmativo del verbo “hacer”. Algunos imperativos en español perdieron la “e” final” tal vez por influencia de dialectos orientales cercanos al catalán. Si pueden notar los imperativos de “tú” son iguales a la tercera persona del presente de indicativo. Por ejemplo: “él canta todos los días” y “tú, canta, por favor”. O “mi marido vuelve a las 5pm” y “vuelve ya!”. Hagan el experimento con imperativo de “tú” afirmativo (no metan el de negación, porque esa es otra larga historia) y verán que funciona.

Pues bien, el experimento no funciona para verbos como “tener” y “poner” en “tú”. Si se siguiera la regla general, se diría “Tiéneme la cartera, por favor” o “póneme esto por ahí, por favor”. Pero aún así hay quien dice así, pero no se considera parte del español estándar. En “El carnero” (1637) yo encontré un caso de “tiéneme la capa” que le dice un señor viejo al autor cuando estaba niño. Pero como digo, la forma general sería “ten” y “pon”: “tenme la cartera” o “ponme eso por ahí”.

La forma regularizada sería “háceme el favor” (no confundir con el vos “hacéme el favor” porque esa también es otra larga historia). La forma estándar sería “hazme el favor”. En español peninsular la “c” sí tiene un sonido diferente de “s”, que es la articulación interdental: la lengua entre los dientes delanteros es lo que suena tan españolete, pero solo en lo que se escribe con “z”, “ce” o “ci”.

Otra estandarización ortográfica, pues, fue no permitir la “c” al final de la sílaba porque entonces eso sonaría como “k”, caso de extranjerismos como “coñac”, que nadie pronunciaría “coñás”. Por eso se usa “z” en vez de “c” para los sonidos interdentales finales de sílaba. Por eso quedó “haz” y no “hac” para el imperativo de “hacer”: “Haz tus tareas”, “haz lo que tengas que hacer”, “hazlo ya, pero hazlo”.

En español de América se perdió la distinción entre “z” y “s” aproximadamente para los siglos XVI o principios del XVII, pero la convención se mantuvo para la escritura cuidada y formal. Hasta finales del siglo XVI había unos que todavía distinguían entre Z CE CI y S, pero había otros que confundían, y ya el siglo XVII la confusión está extendida.

En mi tesis de maestría (Díaz Collazos, 2011, p. 50-60) hay una detallada exposición bibliográfica de los autores que trabajaron este tema. Cuando yo revisé documentos históricos directamente en el Archivo General de la Nación en Bogotá, me di cuenta de que la realidad era más sencilla de lo hacía ver la extensiva bibliografía: unos confundían Z con CE y con CI, pero nunca con S, posiblemente del norte de España, y otros confundían todo, posiblemente los de origen andaluz.

Como estaba muy reciente el cambio, los errores ortográficos se manifiestan a montones, y solo se estandariza la norma escrita de qué va con Z, con C o con S hasta el siglo XVIII con la creación de la Real Academia. Pero en Colombia, entre otros documentos coloniales que revisé para la tesis doctoral que publiqué en 2015, aunque el tema era otro, noté que la norma escrita solamente se estabiliza en el siglo XIX.

Otros significados menos habituales de “haz” con zeta son con el sentido “atado de trigo”, que viene del “fascis”. También “Tropa ordenada o formada en unidades”, del latín “acies”. Y “cara o rostro”, del latín “facies”. Esta se relaciona con el sentido de “haz” como uno de los lados de la hoja.

Y por último está la palabra que sí se escribe sin hache que es “as” y se refiere a los naipes. Al parecer en latín era “assis”, una moneda romana, y se define así en el diccionario: “En la baraja o el dado de póquer, elemento marcado con una sola señal”.

Referencias:

Díaz Collazos, A. M. (2011). Huellas del español de América en el siglo XVI según documentos producidos por la Audiencia de Santa Fe: Evolución lingüística e interacción jurídica en la sociedad colonial (Tesis de maestría, Instituto Caro y Cuervo). https://biblioteca.caroycuervo.gov.co/cgi-bin/koha/opac-detail.pl?biblionumber=30386

Díaz Collazos, A. M. (2015). Desarrollo sociolingüístico del voseo en la región andina de Colombia (1555–1976) (Beihefte zur Zeitschrift für romanische Philologie, 392). De Gruyter. https://doi.org/10.1515/9783110404142

Rodríguez Freile, Juan. (1997, original de 1638) El carnero según el otro manuscrito de Yerbabuena, ed. Mario Germán Romero, Bogotá, Instituto Caro y Cuervo. [ms. 1638].